PLANTA PARA ESTE MES DE AGOSTO
ADELFA
(Nerium oleander)
Castellano: adelfa
Catalán: baladre, llorer rosa, oleandre
Aunque se cree originaria de
Asia menor, la adelfa es una planta que crece espontáneamente en la zona
litoral de la cuenca mediterránea y del sudoeste asiático, aunque también se ha
aclimatado en Indochina, en el norte de Africa y en varias áreas de las zonas
subtropicales de America.
Nerium significa, en griego “húmedo”,
mientras que oleander hace referencia a la similitud de las hojas de esta
planta con las del olivo. La adelfa es un arbusto arborescente de 2-3 m de
altura, con ramas ternadamente divididas y cubiertas de una corteza esponjosa
de color gris verdoso. Las hojas son glabras, persistentes, lanceoladas,
enteras, verticiladas de tres en tres u opuestas, coriáceas, de color verde
oscuro y con una gruesa nerviación central. La inflorescencia es un corimbo
terminal de bellas flores olorosas, como de cera, con cinco sépalos y cinco
pétalos rosados o blanquecinos, soldados por la base. La corola, que es tubular
por su base, acaba en una copa de unos 4-5 cm de diámetro. Los frutos son unos folículos alargados que contienen
semillas minúsculas. Si se hacen unas incisiones en las ramas, muchas adelfas
segregan un látex venenoso.
VIRTUDES MEDICINALES
Sistema cardiovascular: la
oleandrina es semejante a la digitalina (alcaloide
glucosónico con propiedades cardiotónicas)
y digitoxina (alcaloide cardiotónico y antiarritmico),
presentes en plantas de reconocida eficacia cardiaca como la digital y el
estrofanto. Es menos activa, pero de acción más rápida que la digital, por lo
que no existe tanto riesgo de acumulación, si bien presenta el inconveniente de
poseer una actividad terapéutica mucho menos intensa.
Sistema urinario: la
adelfa posee un discreto efecto diurético por sus principios activos de tipo favonico.
Por vía externa es un parasiticida
utilizado en el tratamiento de las tiñas y la sarna. A otro nivel también se ha
utilizado como raticida. A pesar de su menor actividad terapéutica, no se puede
obviar su toxicidad sobre el corazón; los síntomas iniciales son dolores de cabeza,
nauseas y vómitos, diarrea y alteraciones cardiacas. En dosis más elevadas produce un enlentecimiento del
pulso cardiaco, que además se torna arrítmico y puede provocar la muerte por
paro del corazón. Por ello, es una planta que debe utilizarse exclusivamente
bajo prescripción médica.
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Ficha botánica de la Adelfa (Nerium Oleander) |